El Manchester United marca su postura de cara al mercado de pases.
El Manchester United ya sabe con qué jugadores contará y con cuáles no para la próxima temporada. En ese sentido, se plantea un éxodo de entre 8 o 9 futbolistas.
Las posibles salidas son las de Casemiro, Sancho y Rashford, que podrían liberar fondos para fichajes. Del mismo modo, la zaga defensiva sufriría una desbandada general, con Lindelöf, Maguire, Wan-Bissaka, Dalot, Shaw y Malacia en la cuerda floja.
Por otra parte, Mason Greenwood, cedido al Getafe la pasada temporada, no tiene un futuro claro en el club.
Expectativas desalineadas:
Bruno Fernandes, considerado el jugador más talentoso del equipo, busca una mejora salarial que lo posicione entre los mejores pagados del club (más de 350.000€ semanales). Su ambición choca con la inestabilidad financiera y directiva que atraviesa el Manchester United, pues el club no se encuentra en condiciones de satisfacer las demandas de Fernandes, lo que genera incertidumbre sobre su futuro.
Intransferibles:
Alejandro Garnacho, Rasmus Hojlund y Kobbie Mainoo son considerados «intocables» por la directiva y representan la promesa de un futuro mejor. El United confía en que estos jóvenes talentos puedan convertirse en los nuevos referentes del equipo.
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