Más allá de sus hitos en el césped, Lionel Messi posee una de las colecciones de automóviles más exclusivas y valiosas del planeta. Entre las joyas que descansan en su garaje destaca el legendario Ferrari 335 S Spider Scaglietti de 1957, una pieza de colección por la que habría desembolsado cerca de 35 millones de euros en una subasta histórica. Esta «obra de arte» lidera un repertorio donde la velocidad y el lujo son los protagonistas indiscutibles.
El capitán de la Selección Argentina también disfruta de ejemplares de vanguardia como el Pagani Zonda Tricolore, un hiperdeportivo del que solo existen tres unidades en el mundo.
Para el día a día en Miami, Leo apuesta por la comodidad y el espacio de su Cadillac Escalade y el lujo británico del Bentley Bentayga. Desde los clásicos deportivos italianos de Ferrari y Maserati hasta la eficiencia del Lexus RX 450h, el garaje de Messi es el reflejo de una carrera marcada por el éxito, combinando la adrenalina de los motores V12 con la elegancia de las marcas más prestigiosas del mercado automotriz.
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